MAHAKI PAKOMIO TEPANO REINA DE LA TAPATI RAPANUI 2011

Mahaki Pakomio Tepano, Reina 2011, emocionada, entre decenas de globos lanzados al aire, y agradeciendo a su familia, a sus amigos y a su pueblo por haberle permitido vivir una experiencia “tan hermosa”, finalizó la Tapati Rapa Nui de este año, una sublime fiesta ancestral que durante diez días plagó de magia a Isla de Pascua, a la etnia, a los residentes y a los más de tres mil turistas que se maravillaron con esta muestra de cultura viva, que respeta sus tradiciones y recuerda y rinde homenaje a su historia y a sus antepasados.

Una vez más, y como ya es una característica, la Tapati, la conmemoración cultural más significativa de la Polinesia, fue el centro de las actividades del pueblo rapa nui, que apoyando a las dos candidatas, la hoy reina Mahaki y a Pua Tuki Atan, revivió cerca de 50 artes ancestrales, entre ellas cantos, danzas, artesanía en piedra y madera, gastronomía, ritos y deportes.

Para la Alcaldesa de Isla de Pascua, Luz Zasso Paoa, la versión 2011 de esta fiesta ancestral fue, como siempre, una muestra tangible de una cultura que se mantiene viva y que de generación en generación va traspasando sus tradiciones. “Me siento muy orgullosa de mi etnia”, señaló la jefe comunal, destacando que niños, jóvenes, adultos, nuas y koros (ancianos) participaron en forma activa, ya sea confeccionando trajes de mahute, collares de pipi o sombreros de ramas de palmeras; esculpiendo la piedra o tallando la madera; pintando el cuerpo con takona; cocinando comida típica; danzando y cantando; o participando en las muchas muestras de deportes ancestrales, como la pesca, el canotaje, las carreras a caballo o el Tau´a Rapa Nui, una competencia similar al triatlón donde se alternan tres modalidades de carreras tradicionales: vaka ama, canotaje en pequeñas embarcaciones de totora; pora, natación en flotador de totora; y aka venga, carrera con dos cabezas de plátanos, de 20 kilos aproximadamente, transportadas sobre los hombros a través de una varilla.

Algunas de las artes que más llamaron la atención al público –etnia, residentes y visitantes- fueron la presentación de las candidatas en trajes típicos y la participación de los conjuntos de baile y canto, tanto de niños, juveniles y adultos. “Es impactante ver en el escenario a decenas de personas bailando y cantando como lo hacían nuestra ancestros y lo destacable es que esos grupos están integrados por las candidatas, sus familiares, amigos, residentes y turistas que se unen a esta fiesta como un símbolo de hermandad y participación”, señaló la Alcaldesa, que, como una de sus tareas edilicias más importantes, se ha preocupado de rescatar las tradiciones e impulsar la profundización de la enseñanza de la lengua rapanui